¿Qué decir?
Soy fácilmente sugestionable.
Hace ya días que me registré en un foro de suicidas. Creo que esto ya lo dije. Me metí allí y desde el principio ya me sentía intimidada por todos. Es una mezcla de temor a la unidad de los demás (una unidad de la cual no formas parte) y un sentimiento de rareza al ver que todos sueltan olas de empatía y mensajes de aliento a ti, en especial cuando dices que eres un adolescente, un ser humano que no ha salido de la juventud. Me asustaba como todos se saludaban en el chat, de forma tan común y como si se conociesen siendo amigos de toda la vida. A mí me asustaba un poco todo eso. Porque yo estaba "Hola, ¿hay alguien? ¿Quién quiere conversar conmigo?", y eso rozaba el patetismo del miedo que causa el ser nuevo en algún lugar. Todos venían con consejos y palabras de aliento, etcétera. Eso era raro para mí, no estoy muy acostumbrada a que la gente tome en serio mis pensamientos suicidas ni profundice para intentar ayudarme con los problemas que planteo como aflicciones insoportables.
Cuando les hablé de haber alejado por completo a mi padre, en lugar de hacer lo que hacen los demás, empezaron a preguntar el por qué de eso, a buscarle una razón de ser. ¿Cuándo comenzó?, ¿sabes por qué?, ¿qué hay de tu madre?
Acostumbro a que digan "es triste" sin una verdadera expresión de mucha empatía y eso es todo. Siempre es lo mismo, es tan deprimente y mecánico que me hace sentir melancolía.
Cuando les hablé de mi gusto por utilizar pastillas de forma frecuente y mi recurrente ansiedad al no tomarlas (una ansiedad que pasa cuando estoy en medio de alguna clase, comienzo a tener nerviosismo y ansiedad y sólo quiero alguna píldora, de lo que sea), me dijeron si alguna vez había tenido una sobredosis, a lo que respondí que no. Porque no ha pasado.
Ayer me enviaron a casa desde la escuela. Me dejaron en la enfermería porque todo lo tenía muy bajo, no podían oír mi pulso por lo débil que estaba. Luego estaba lo de la glucosa. Me comí un chocolate, porque la enfermera me dijo que comiera algo con azúcar, y tenía la glucosa en 110. Después de un rato volvieron a pincharme el dedo y mi glucosa ya iba por 98 en menos de una hora. Mi temperatura primero estaba muy alta y luego me estaba congelando. Todo eso después de que fui sólo por una píldora. Quise aprovechar lo de mi vértigo para decir que estaba mareada y preguntar si podían darme alguna píldora para el dolor de cabeza, pero cuando la enfermera quiso revisar mi pulso y era casi imposible encontrarlo me dejó allí y me dijo que no me podía dar nada. Lo bueno es que pude faltar hoy y estuve sólo una hora en clase ayer. Lo malo es que tengo que volver mañana, mierda.
La diferencia entre ella y yo es que tuvo una vida complicada que yo quiero. La criaron en los bares gays y yo todavía sigo sin poder salir. Nos diferencia el que ella es bonita y yo no, el que ella es exitosa y yo no, el que ella se ha ganado un lugar como adicta y yo no, el que ella es lo que yo no puedo ser. ¿Y qué? Podría ser homosexual, con ella es algo obvio. Nos diferencia la sociopatía.
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